Sexy y borracha asi termine clavada

Hola, mi nombre es Rocío y estoy en esa etapa que muchos conocen como "despertar sexual". Últimamente estoy teniendo muchos deseos con hombres mayores y no se porqué. Cada vez que estoy a punto de acostarme cierro los ojos y me imagino a un hombre de unos 30 o 40 años, acariciándome lentamente, besando mi cuello hasta bajar a mi vagina, y después sintiendo su enorme pene dentro de mí; sinceramente luego de esto no puedo evitar mojarme (lo cual es obvio).
Un día esta "fantasía" se me hizo realidad.
Un sábado por la noche fui con mi amiga Lucía a un boliche llamado "Metropoli", como tengo un cuerpo que es envidiado por muchas mujeres y no parezco de 15 me resulto muy fácil ingresar al lugar. Una vez dentro, con Lucía nos fuimos a recorrer el lugar hasta instalarnos en el bar tomando algo y bailando. En un momento de la noche pusieron música "sexy" y yo, algo borracha y muy enfiestada, me puse a bailar como una verdadera zorra. Todo el mundo volteaba a verme, yo podía notar como a varios les crecía el miembro con solo ver mis movimientos y especialmente uno de todo ese montón llamo mi atención. Era un morocho, alto, de ojos claros, tenia una boca hermosa, de unos 35 años y se notaba claramente que se había excitado con mi baile.

Yo sin pensarlo dos veces me acerqué a el, apoye mi culo contra su pantalón y empecé a menear. El tomó mi cintura y comento lentamente a acariciar mi vagina sobre la pollera hasta que en un momento me dio vuelta y me besó. Nuestras lenguas parecían que tenían una pelea en nuestras bocas. Yo en ese momento me había mojado entera. Este hombre Julián creo, me invitó a su casa yo sin pensarlo dos veces le dije que sí.
En su auto mientras el conducía yo le empecé a acariciar su erecto pene sobre su pantalón. Tal fue su excitación que su miembro salió de su lugar. En ese instante lo tome y lo empecé a masturbar hasta luego llevarlo a mi boca. Comencé lamiéndole la puntita hasta que luego me lo mentí entero. El gemía y yo mas profundo me lo metía hasta que en un momento frenó el coche de golpe y me dijo: -No puedo más, te voy a coger acá nomás. Se estacionó a un costado de la carretera, me tiró al asiento trasero y el se lanzó sobre mi. Como un animal me desabrochó la camisa hasta quedar a la vista mis pechos sobre mi brassier de encaje negro, el me lo bajo para que quedaran a la vista mis tetas con mis pezones erectos, los comenzó a lamer, yo solo gemía. Con una de sus manos corrió mi tanga y comenzó a acariciar mi concha totalmente húmeda, mientras que con su otra mano apretaba mi trasero y me daba nalgadas. Yo ya no daba más y le supliqué que me la metiera, el me hizo caso y de un solo golpe la metió. Grité. La metía y la sacaba con fuerza y eso me encantaba, yo lo di vuelta y me subí encima de el, el tomó mis caderas y comenzó a sacudirme fuertemente de un lado para otro sobre su miembro, yo gemía hasta que llegue al orgasmo. FUE LO MEJOR DIOS.
Cuando pensé que había terminado, me tomó de la cintura y me la metió por atrás, era la primera vez que hacía sexo anal, me dolió cuando entró pero no puede evitar retorcerme de placer. Mientras estábamos en la pose de perrito el me tocaba mis pechos mientras metía su pene en mi culo con una fuerza tremenda, luego de un rato los dos estallamos en un orgasmo, finalmente me acabo dentro, lo cual me encantó.
Luego me llevó a mi casa y bueno intercambiamos números y eso