A la Sra. Delia le defloro el orto

Muchas gracias a todos los que me han leído en estos relatos que me está contando mi amigo Edgar Torres, quien es el que está disfrutando a esta hermosura de señora, quien ya tengo el placer de conocerla, déjenme decirles que esta señora es toda una diosa en carne y hueso. A mi se me paro la verga con solo verla, esta deliciosa como la describe mi amigo, pero no seré tan mal amigo como para pedirle que también se acueste conmigo.
Pero iremos directo a la historia: Días después de haber estado con ella en mi casa y sobre todo en la cama donde pernoctó noche a noche, su recuerdo estaba aun presente donde nos dimos un tremendo revolcón sexual, al estar acostado se me venían esos recuerdos a mi mente, el calor de sus besos, la ternura de sus manos sobre mis intimidades masculinas, su hermoso cuerpo al desnudo.
Mi consiente era incapaz de asimilar que una mujer de sus condiciones y su físico hubiese tenido un encuentro sexual conmigo.
La calentura de las circunstancias eran demasiadas, recordar como ella y yo embonamos a la perfección en una cama, nuestros cuerpos fueron uno solo en esa entrega inundada de sexo, pasión y lujuria.


Eran cerca de las 3 de la mañana de casi una semana después de habérmela cogido, si suena un poco raro que me haya bañado a esas horas pero les seguro que hacía demasiado calor en mi casa, más y que el mini Split estaba descompuesto. Al salir de la regadera y al llegar a ni recamara vi que mi celular estaba parpadeando su luz en medio de toda la obscuridad. Al revisarlo vi que era un mensaje de la mismísima señora delia, en el me decía:
"deseo pasar otro momento inolvidable en tu cama, besitos, Delia" esto me reafirmaba que ella estaba deseosa de tener sexo conmigo y que el trabajo que le había hecho le había gustado.
Le respondí el mensaje diciéndole que yo también la extrañaba y que deseaba volver a pasar con ella momentos agradables como los de días pasados. Que necesitaba de su cuerpo para saciar esa sed que tenia de una mujer.
En otro mensaje me decía:
“Quiero tenerte desnudo en mi cama, para que me hagas tuya siempre que desee”
¿Cómo decirle que no a una mujer tan hermosa como ella, quien me dio su cuerpo para hacerlo mío las veces que yo quisiera? ¿Ustedes la despreciarían?, yo creo que no, por eso acepte seguírmela cogiendo como la primera vez en mi casa.
Al día siguiente que me mando ese mensaje la señora Delia me llamo, estaba muy excitada y cachonda, sus palabras fueron: “ven, ándale quiero que me la metas de nuevo, ándale, te espero en mi oficina”
- “¿Esta sola?”
- “Si ándale vente, aquí te espero” respondió
- “Deme 10 minutos y llego” respondí
Tome mi teléfono, las llaves del carro y el celular, rápidamente baje las escaleras, me despedí de mi mama diciéndole que iría con unos amigos al cine además de pasar el rato en una cafetería. Salí a prisa de la casa, también tomando mis precauciones al volante, no por cachondo provocaría un accidente.
Al llegar a su oficina, esta en el 3 piso en un edificio del centro, lo peculiar de donde está la oficina de la Sra. Delia es que es un lugar donde siempre hay prostitutas, de todas las edades, un día una viejita de unos 70 años me la quería mamar a cambio de 30 pesos. Obviamente no paso nada con esa abuelita.
Toque el timbre y sin preguntar nada, me abrió la puerta eléctrica. Al verme se me abalanzó encima y me comenzó a besar, a acariciar de una manera inesperada, alocada, loca, llena de pasión y de lujuria.
Con decirles que no me di cuenta a qué hora me quede desnudo, pues me estaba dando un placer la forma como me estaba tratando la señora Delia. Al verme la verga parada, ella se hinco y me comenzó a mamar mi verga como lo estaba en su temperamento: cachonda, erótica, apasionada y con ganas de arrancármela, pues estaba engulléndola completa, masajeándome los huevos de una manera desesperada.
En un movimiento se aparto de mi, se levanto el vestido que traía, así quedo desnuda, pues no traía pantaletas ni brasiere, me imagino que ya se las había quitado antes de que llegara, creaneme que ni en las porno que veo no había visto a una mujer tan deseosa de verga como ella.
Se me acerco, me dio un beso en los labios, estaban muy calientes y con un aroma impregnado de mi ser que estaba desprendiendo, todo esto porque la señora Delia estaba bien cachonda. Ella se acomodo en su escritorio, ya no tenía ningún papel encima del mismo, solo su teléfono.
“ya métemela, dame toda tu verga” me lo pedía a gritos
Ya sin decirle anda, me puse en medio de ella, la acerque un poco más a la orilla de la cama y comencé a darle una cogida que jamás olvidaría, ella se aferraba a mí al enterrarme las uñas en la espalda, yo la perforaba con mayor intensidad cada vez
“si, dámela, me urge que me des mas” me decía
“si, si, que delicia de mujer es usted” le respondí
“cógeme, dame tu leche, dámela ya” me volvía a repetir
Me encanta que me diga cosas como esa, me agrada que ella se sienta deseada por mí, que sienta que no hay nadie más que la satisfaga en cuestiones de sexo. Eso es como gasolina que enciende mi motor estando con ella. Por eso la penetre con más fuerza, mis huevos chocaban con su pelvis, dándonos más placer a ambos.
“ya aviéntame tu leche” suplicaba
“si, ahí va” le respondí
El orgasmo de mi venida fue algo que sentí desde los huevos hasta la cabeza, el flujo de semen viajando desde mis huevos hasta que salen de mi verga fue una grata sensación, en total Fueron 4 horros de leche los que le di a aguardar en su cavidad vaginal.
Sin dejar de abrazarme, así nos quedamos después del orgasmo que tuvimos al mismo tiempo, mi verga salió de ella aun empapada de fluidos de ambos. No sé si fue mucho el semen que me salió o demasiados los fluidos de ella, pero estos escurrieron de su vagina.
Antes de que se incorporara, me dio un besos muy cachondo en la boca, hasta los labios me mordió, después nos separamos la señora Delia se incorporo, camino como un caballito recién nacido, sus piernas aun temblaban.
Del piso recogió toda su ropa y me hizo vestirme a mí, pues no sabía si su jefe llegaría pronto a la oficina y pues al vernos así esto le podría causarle problemas. Apenas terminaba de vestirme cuando se oyo que alguien tocaba la puerta de su oficina, así como una voz masculina algo ronca que dijo
“Delia, ¿tiene las facturas que le pedí en la mañana?”
“Si señor Chávez, ahorita se las doy”, ya que se alejo el señor la señora delia me pidió que saliera con unos legajos en la mano, para que creyeran que estábamos revisando algunos documentos.

Cuando Salí de ahí el Sr. Chávez estaba viéndome, se me acerco y me pregunto sobre el motivo de porque estaba en esa oficina, yo le respondí que estaba checando unos papeles con ella. Sonriendo irónicamente me dijo:
“no te hagas pendejo, si se oyó en todo el pasillo como te la estabas cogiendo, solo te advierto, que esa mujer es mía”
“hasta cree pinche viejo, a mi usted no me da miedo, no le hago nada, porque si le iria mal” le reclame
Cuando íbamos saliendo ella me mando un mensaje:
“no te preocupes por este viejo, tiene tiempo insistiéndome que quiere coger conmigo, pero no se le ha hecho al wey, acuérdate bebe, perro que ladra no muerde”
“no quiero problemas, si estas con el ni bronca, pero que quiere conmigo, a lo mejor ni se le para al wey”
“mira, hace poco le metí una demanda por acoso, siempre esta buscando la forma de estar conmigo, pero no se le va a hacer nada, para eso te tengo a ti mi muñecote, vete con bien, no te apures”
“me parece bien”
Ya cuando llegue a la casa me puse a escuchar una estación de radio local y por mencionar ciertas cosas me gane un par de boletos para un centro nocturno a ver unos comediantes, el inconveniente es que era ese mismo día en la noche. La decisión de a quien llevar rondo por mi mente, no sabía a quién de todos iba a llevar a ese lugar, eso se me ocurrió la brillante idea: la Sra. Delia.
Sin pensarle tanto le mande un mensaje donde le decía que si aceptaba ir conmigo a ese lugar, y que si después nos iríamos a su casa aprovechando que no habría nadie en ella, ya que me había quedado de estar más con ella, de probar su cuerpezote y sus deliciosas nalgas.
A los 5 minutos me responde: “claro que si, ardo de ganas de que me la metas”
Ya después en otro mensaje nos pusimos de acuerdo en hacer las cosas, de cómo nos veríamos y como le haríamos para ir a la noche a ese lugar donde se presentan comediantes. La cita seria ir yo por ella a su casa y de ahí nos pasaríamos a ese lugar.
A las 10 de la noche pase por su casa, cuando salió, mi expresión era de: ¡No mames!
Su cuerpo estaba cubierto por un hermoso vestido largo de noche, ajustado, marcándole esas tetotas, y se le formaba un culo delicioso.
-que culote
-gracias muchachote, ¿pero por qué quieres llevarme a mí, hay mas muchachas acordes a tu edad, mas jóvenes y hermosas y no esta vieja como yo, la gente va a decir que soy una chacalona?
-eso no importa, a mi me vale lo que la gente diga, además que usted es hermosísima
-favor que me haces, mira que tal me veo
-ya se lo dije, mire como ando, ya se me paro la verga con solo verla
-ya no seas payaso, ¿a poco tan bien me veo?
-la verdad es que si, se ve muy elegante y muy bien.
Avanzamos al lugar a donde nos pasaríamos la velada, el valet parking se saco de onda cuando después de que nos bajamos del carro, la señora Delia me dio un tremendo beso en la boca. Debió haber pensado que ella es quien busca a jovencitos, cuando todos los que me han leído saben que es al revés la cosa.
Entramos por un largo pasillo, este lugar tiene también asientos y mesas en la parte de arriba, de hecho ese fue el lugar que nos correspondió. Mi premio incluía solo cervezas y refrescos gratis durante la velada, así como la cena, ya si quisiéramos una bebida preparada o algo más ya eso tenía otro precio.
Nos la pasamos de la mejor manera posible, los comediantes nos sacaron unas risas, mas a ella que casi no se ríe (tono de ironía, pues su risa contagio a mas de 10), a quien le sacamos de onda también fue a un comediante, pues al vernos creyó que era mi mama, pero otra vez nos tuvimos que dar un beso en público, para que vieran que había una relación, de hecho le dijeron “asalta cunas” pero le explique que a mí me había gustado ella. El cómico se quedo con el ojo cuadrado.
Salimos de ahí como a las 2 de la mañana, no tomamos ni un sola cerveza, solo refrescos y fumamos como “chacuacos”, a pesar de esto nos la pasamos muy divertidos, además que yo iba a manejar y así evitaríamos un accidente al volante.
Al llegar a su casa, las cosas tomaron un tono semi porno, pues en la calle cuando ella se bajo de mi carro se agacho, no supe porque lo hizo, lo descubrí cuando se me acerco, me dio un envoltorio y me dice: ten, este es un adelanto de lo que te espera ahí adentro.
Al ver lo que me dio vaya sorpresa: era su tanga. Estaba mojada, empapadisima. Su olor era demasiado, esto advertía que deseaba que al estar conmigo la excitaba de una manera diferente a los demás hombres que tuvo en su vida.
Nos subimos de inmediato a su habitación, yo me pegue a ella como una sanguijuela, mis manos tocaban todo su cuerpo, mi boca se pego a su oreja derecha, y se deslizaba hasta su cuello, después le daba vuelta hasta la otra oreja y hacia lo mismo.
“espérame, permíteme quitarme todo” suplicaba
Me aparte de ella y el espectáculo comenzó, se dio la vuelta, me pidió que le ayudara a bajar el zipper, al terminar de hacerlo el mismo cayo hasta el suelo, como les había dicho ya no traía tanga, solo el brasiere. Se me repego dándome la espalda, sus nalgas quedaron justamente, mi boca se pego a esas deliciosas nalgas, me di un festín de livinosidad con ese delicioso trasero de la Sra. Delia.
“así mas, pásame la lengua por mis nalgas” decía
Me divertí tanto con esas nalgotas, que sentí que me moriría asfixiado en medio de ese acuoso y sustancioso culote que se había convertido en mi delirio sexual.
“no te olvides de mis tetas, estas también quieren su tratamiento mi niño” decía
Su brasiere salió sobrando, ella mismo se lo quito dejando esas perfectas y soberbias tetas que ante mi estaban en esos momentos. Sus deliciosos pezones estaban muy rigidos y tiesos, esperando a mis labios para mamarlos. Me faltaba boca para mamarlos como dios manda, pues estaba tan caliente, que no me di cuenta que varias veces se los mordí, pero a ella no pareciera importarle por lo lujuriosa que estaba disfrutando de ese momento.
La Sra. Delia me incorporo de la cama, en un santiamén me quito toda la ropa, me dejo desnudito al 100%, mi verga estaba mas que parada, esta tremenda erección me estaba quemando, ya no aguantaba mas tener mi verga parada y sin metérsela. Ella se movió hacia donde estaba ya mi pene parado, lo metió a la boca sin hacerle ascos, se lo engullo por completo. Esta felación generaba un placer exquisito en mis órganos sexuales.
Agarrandome el pene, sosteniéndolo firmemente se lo fue clavando en su vagina, asimilando el tamaño de mi pene en sus adentros así se mantuvo un buen momento, esto para poder acomodarsela bien en su panocha.
Ya que se adapto me tomo de las manos para apoyrse en ellas, así dejando cae todo su peso en ellas se comenzó a moverse como desenfrenada de azelante para atras, clavándose mi pene por completo.
-"así me gusta, se siente completa corazón" me dijo
Se seguía moviéndose en mi cuerpo teniendo mi verga por completa, se la clavo toda en la vagina, parecía una niña con juguete nuevo. Su vagina estaba mas que lubricada pues sus fluidos escurrieron hasta mis huevos y por consiguiente en la sabana de la cama.
-"así te gusta, que esta vieja se monte en ti mi muchachote precioso"
de pronto ella se levanto, sacando mi verga de su panocha, se acomodo de otra manera y de nueva cuenta me volvio a agarrar mi verga, ahora despacio y lentamente se lo clavo despacio, disfrutando el largo de mi pene en su vagina. Ahora estaba entrando y saliendo de el, se divertia dándose unos sentones deliciosos en mi verga. El verla como se la estaba clavandosela en su vagina y que estaba gozandola como loca, provoco que mi pene vaciara su semen por completo en su vagina.
-"aghh que deliciosa verga te cargas" me dijo
Al decir eso la sra. Delia se recosto sobre mi, poniendo su cabeza en mi pecho. Yo acariciándole la cabeza le decía que no pensaba que encontraría a alguien como ella, que no conocía el verdadero significado del sexo.
La platica estaba muy interesante, ella me hablo sobre sus parejas del pasado así como de todo lo que vivió cuando vivió en león gto. Yo le platique de mis parejas y que no tenia suerte en el amor, solo relaciones pasajeras pero sin llegar a nada formal. Así sin darme cuenta ella se quedo dormida en mi regazo, para que ella pudiera descansar lentamente la a acomode en un lado de la cama, así descansaría mucho mejor que en la posición que estaba anteriormente.
Intente dormirme un poco a su lado, pero algo me lo impedía, eso era porque mi mente no asimilaba la idea que estábamos juntos en una cama. Después de haber disfrutado de esta sesión intensa de sexo.
En un momento dado, no supe de mí, pues me quede dormido a su lado. Como a las 4 de la mañana me desperté, la Sra. Delia seguía dormida, con su cuerpecito de lado, sin ropita, con delicioso traserote al aire ¿Qué harían? , si, así es. Me acerque a ella, mi verga reacciono de inmediato, paradita se la repegue en sus nalgas. Creí que al señora delia se despertaría, pero no fue así. Pase mi verga a lo largo de su vagina, ella aun en su inconsciencia no dejaba de mojarse, ya estaba mojada para podérmela cogérmela.
La di media vuelta, le separe sus piernotas, ella solo gemía, disfrutaba lo que le estaba haciendo. Me baje un poco a mamársela, estaba como ríos, no les voy a mentir, ella estaba toda mojada, ya estaba lista para recibirme en sus interiores.
Le abrí las piernas, me acerque a ella, agarrándome la punta de la verga me dirigí a su entrada vaginal, despacio se la clave poco a poco centímetro a centímetro, la vagina de la Sra. Delia recibía mi pene en todo su esplendor, en eso ella se despertó: “métemela despacio muchachote, me gusta pero despacio hijo”.
La cogida siguió, yo encima de ella bombeándole con mi verga, ella solo cerrando sus ojos y gimiendo como loca, “ah, ah” y solo articulaba algunas palabras “así, dame, así así”, yo seguía bombeándola mas y mas, mi verga entraba y entraba mas y mas de su panocha donde me la estaba albergando.
Después me puse sus piernas en sus hombros, así mi verga entra mas en ella, provocándole a la Sra. Delia, ella se sentía muy gustosa de recibir mi miembro viril erecto. LA Sra. Delia solo se retorcía al recibirme en sus adentros, me apretó mas la pilinga con su vagina y sus manos rodearon mi cuello y me jalaron hacia ella, con una desesperación de quererme arrancarme la cabeza.
“andale vente, dame tu leche corazón, dejame sentir tu leche en mi panochita” sus palabras tenían algo mágico, pues cada vez que ella me lo pide por lo general me vengo dentro de ella. Pero esta vez quise hacer algo diferente, me Sali de ella, me trepe a la cama y al momento de venirme lo hice directamente en su cara, mojándole un poco el cuello.
“ay mi muñequito, están bien calientes” solo alcanzo a decirlo
Yo me quede encima de la cama, con ella viéndome hacia arriba, sosteniéndome la verga se atraganto con ella para limpiármela, hizo hacia atrás el cuerito que cubre la cabeza y me dio una limpieza total con su hermosa boquita, sus manos acariciaban mis huevos, después se saco mi verga de la boca y me dio una lambida en los huevos, probándolos y sintiendo mis vellos en ella.
Posterioremente, unos 5 minutos de estarme dando esa felación en mis testículos y y mi pito, me indico que me bajara de la cama, me tomo de la mano y nos fuimos directo al baño. La Sra. Delia se sento en el wc y comenzó a hacer pipi y yo me quede quieto en la puerta del baño, me pidió acercarme a ella, y se volvió a meter mi pene en su boca, así la mantuvo hasta que se me erecto e nuevo. Sin dejármela de mamar abrió la llave de la regadera.
Cuando el agua estuvio muy bien para nosotros nos metimos, ella me dio la espalda y yo repegaba mi verga bien parada en sus nalgotas, en esa rajota que se forma entre ambas montañotas de carne.

"¿quieres metermela por el culo?" pergunto

"si me gustaria, pero no se como" respondi

"esperame, deja ahi vengo" al decir esto la sra. delia se salio de la regadera, pero no del baño, observe que del botiquin saco algo.

Al regresar llego con un frasco, no traia nombre, pero al abrirlo note que tenía un olor peculiar, ademas que ella me dio un condon.

"ponte el condon, despues le embarras esto poquito," explicaba mientras ella tomaba también de esa crema y la untaba en su ano, despacio, se abria las nalgas con una mano y con la otra se embarro un poco de esa sustancia en su recto.

Extendi el condon a lo largo de mi verga, y también le coloque un poco de esa crema que ella traia en ese frasco, al terminar se lo indique, me pidió acercarme a ella, quien ya estaba con su trasero al aire, ahí adverti la gran cantidad de crema que se había colocado en su esfínter anal.

“despacio ponme tu cabeza de la verga en mi culo, no lo metas, solo colocala” suplicaba

Obedeciéndola tome mi verga y me acerque a ella, apostando mi glande en su esfínter anal.

“abreme las nalgas y haz un poco de presión para que entre” me dijo

Siempre he seguido las instrucciones que me dan para no equivocarme y en esta ocasión hice lo que me solicitaron. Mi verga hacia un poco de presión en su ano, al tiempo que abria sus nalgas, para facilitar la entrada de mi verga en su ano.

“despacio, con calma, ayy, así despacio mijo” me decía

“si Sra. Delia, se lo estoy haciendo Despacio”

Mi verga iba entrando a la velocidad de un caracol, muy lentamente en su ano, ella se retorcía de dolor, pero a la vez lo estaba disfrutando tanto como yo, una vez que mi cabeza entro por completo nos quedamos inmóviles, ella aguanto al respiración, aguanto el aire por un rato, después lo solto y se siguió moviendo hacia atrás, clavándosela mas en su anito.

“sabes, ya me había desacostumbrado a que me la metieran por aquí, que rico se siente, métemela mas” suplicaba
Mis movientos fueron dilatando ams su ano, ya no estaba batallando en entrar como momentos antes, ya estaba mas acostumbrado a mi su culo, ya no hacia tanto esfuerzo al penetrarla analmente, su ano había secido a lo grueso de mi verga.

“rompeme el culo, hazme tuya completamente, tenia ams de 20 años que nadie me la metia por ahí, ahora soy virgen, soy tuya completamente” decía

No soporte mas la textura del condon, le saque la verga violentamente y sopas, que se la dejo ir sin condon, ella respingo, pero no de dolor sino de placer, estaba dándose un festin de placer con mi verga bien clavada en su culote, ahí mismo en la regadera de su casa.

La estuve penetrando como 10 minutos, su ano estaba completamente dilatado, no batalle mas en entrar en ella, que mis huevos ya estaban hinchados de tanto chocar contra su pubis, que un rayo intenso de felicidad inundo mi cuerpo y el de la Sra. Delia, que Salio un chorro de semen que se quedo completamente en sus adentros anales.