Mi amante de 20 años

Soy una mujer muy fogosa y lamentablemente mi pareja no lo es….mmmmm bueno como yo desearia asi que le busque un ayudante un chico de 20 años llamado Ivan con gran entusiasmo y mucha pero mucha energia.
Un dia en el trabajo por necesidades de la empresa tuvimos que trabajar hasta tarde.Ivan y yo somos compañeros de trabajo en una tienda departamental, resulta que varios compañeros y nosotros comenzamos a platicar de nuestras experiencias sexuales esto me exito y como por arte de magia mi pantaleta estaba humeda y comenze a tocar la pierna de Ivan en señal de quiero sexo ya!!!!
con el pretexto de seguir trabajando me levante y me dirigi a mi departamento e Ivan al suyo pero obvio le envie un mensaje al cel para que me encontrara en el area de bodega, yo estaba desesperada por terminar de atender a unos clientes para ir a encontarme con Ivan que ya habia pasado junto a mi y muy discretamente me rozo la pompi derecha.

cuando entre a la bodega rapidamente cerramos la puerta y comenzamos a besarnos como poseidos, me comenzo a desabotonar la blusa, yo le desabroche el cinturon y abrirle la bragueta.
me lamia los pechos, acariciaba mis nalagas mientras le tocaba el pene y los huevos, lentamente me baje a mamarle el pene y besar sus huevos mmmmmmmmmmm…..me encanta ver su cara de satisfaccion como se le ponen los ojitos en blanco y muerde su labio inferior, lami ese pene como desesperada succionando su cabecita y pasando la legua al rededor de los huevos y por todo el falo erecto de mi hermoso Ivan que ya apunto de turron me volteo levanto mi falda hizo a un lado mi pantaleta y comenso a mamarme el trasero y chupar mi vagina, te juro que sentia que tocaba el cielo, ademas de sentir en la piel la humedad mis de los jugos vaginales -de recordarlo me vuelvo a humedecer- no aguante mas y le pedi que ya me lo metiera asi que me quito al fin la pantaleta y me sento en una mesita de trabajo y pas!!
comenzo a embestirme con su pene duro al mismo tiempo mordia mis pechos redondos y grandes. me aferre a el con mis piernas, mientras le besaba su cuello y mordia suavemente su oreja.
fue una experiencia tan rica te juro que hasta logre sentir como se venia en mi -si… eso era ya que senti caliento dentro de mi- termine feliz.
Nos acomodamos el uniforme y salimos como si nada a continuar atendiendo clientes.
Cuando regrese a casa y mi pareja me pregunta:
-¿como te fue?
le respondo bien, mientras recuerdo el super sexo que tuve con Ivan y la emocion que vivi al pensar que alguien nos podria haber visto.